Hoy abandonaremos Pakokku .
El dueño de la guesthouse, un venerable anciano con un excelente ingles colonial, no para de fijarse en nuestras escasas pertenencias.
Tras intentar quedarse con las gafas de ver, crema solar y repelente de Paloma intenta hacerse con los pantalones, camiseta y calcetines de Ivan!!!!
Nosotros mas que nadie entendemos la necesidad de la gente, pero lo del abuelo era puro vicio. Cualquier cosa le servia.
La situacion ha rozado el esperpento, nos ha seguido de camino al embarcadero con intencion de tomarse unos whiskatas de arroz con nosotros a modo de despedida!!!!Menudo elemento, con tal de conseguir algo gratis!!!
Tras un par de horas en barco hemos llegado a Bagan, la ciudad mas turistica de Birmania; pero aqui, de nuevo, como en el resto de ciudades visitadas no hemos visto a casi ningun turista.
La revuelta de los monjes primero y el ciclon despues siguen pasando factura.
Es mucha la gente que actualmente malvive del turismo, todos esperan que en Octubre, Noviembre (temporada alta) las cosas cambien.
Esperemos que asi sea.